Para empezar, carteles de proveedurías, empanadas y pan casero cubren el recorrido hacia Cacheuta.
En segundo lugar, complejos de cabañas se encuentran a ambos lados del camino. Ofrecen estadías confortables con restaurantes y salones de té que ofrecen miles de opciones para degustar. Mate, fogones y asados son otras alternativas para disfrutar.
Por otro lado, turistas de todas partes transitan día a día sus calles, cerros e instalaciones. También disfrutan de los artesanos y de sus hermosos productos elaborados en sus pintorescos puestos ubicados en el playón, antes del puente colgante.
El hotel más importante de la zona es el Termas Cacheuta. Tiene dieciséis habitaciones, un spa termal a modo de continuación del paisaje natural compuesto por piletones de piedras con hidroterapia, y un parque de agua.
Por último, entre las actividades que se realizan al aire libre en las cercanías del lugar se encuentran la tirolesa, rafting, cabalgatas guiadas y salidas de trekking.